jueves, 22 de enero de 2009

Bienvenidos todos


Estimados íntimos y extraños:

Bienvenidos todos a este espacio. Aquí comienza el blog de nuestra película. Indicaros que no empezamos de cero, puesto que la película -a día de hoy- ya ha sido estrenada en dos festivales: uno en España y otro en Chile. Más concretamente, en la 53 Semana Internacional de Cine de Valladolid, donde conseguimos el Premio del Público (hace unos cuantos meses, en octubre), y después en la 7 edición del Festival Internacional de Cine de Viña del Mar (la mismísima semana pasada), en el que tuvimos el honor de clausurar el certamen. En las próximas entradas iré recuperando todas las noticias (muchísimas ya) que ha generado esta película, con sus comentarios correspondientes, las opiniones, las reflexiones juguetonas, las cábalas lúdicas, los raciocinios surreales, etc. Todas esas cosas, en definitiva, que también forman parte de un proyecto y generan su supervivencia.

Sed todos bienvenidos, pues, a este rincón del celuloide. Sin más, y a modo de intro, os dejo a continuación la crítica aparecida en Filmaffinty. Copy/paste:

El dedo en la llaga

Parece como si Rubén Alonso no necesitara encuadrar su primer largometraje en ningún contexto geográfico concreto ni ninguna temporalidad definida, para darle sentido a su coral abanico de personajes devastados por el desamor. En Intimos y extraños, ganadora del premio del público en la sección paralela de la última edición de la Seminci (la 53), aborda sin concesiones los problemas de pareja en el contexto de tres generaciones diferentes: los cincuenta y muchos (espléndidamente interpretados por un casi irreconocible y envejecido Karra Elejalde), la edad media, con Coque Malla y una excelente Blanca Lewin (muchos la recordarán por la película chilena "En la cama"), y la edad adolescente, con los muy televisivos Pablo Rivero y Michelle Jenner. Rubén Alonso, tan hábil en la construcción de guiones sólidamente dialogados como en una puesta en escena eficaz, no da palos de ciego. El film, que nunca reniega de su naturaleza indie, entra a fondo en el cáustico tema de las relaciones de pareja más desavenidas con múltiples y espinosas vertientes que Alonso jamás olvida, y con unos desenlaces a las historias que el espectador tampoco será sencillo que olvide. Siete actores soberbios en estado de gracia asumen todos los perfiles psicológicos y sociales de la situación. Un millonario celoso de su joven esposa, un escritor con problemas de inspiración, la exnovia trastornada del escritor, el nuevo rollito del millonario celoso, el chico gay indeciso y la extravagante compañera de viaje del chico gay, relativamente marginada. Intimos y extraños es un drama de nuestros días cargado de fino humor y emociones, cine basado en el diálogo (textos brillantísimos repletos de audacia), en las situaciones por encima de las acciones. Un film mucho más complejo de lo que a primera vista puede parecer, que se consume con una sonrisa agradable en la cara y poniendo el dedo en la llaga.

Juan José Patino

Copy/paste, asimismo, de la noticia aparecida en Chile con motivo de su estreno en Viña del Mar:

“Íntimos y extraños” dejó su huella en Valladolid, al ganar el premio del público de la sección Punto de Encuentro de la Semana Internacional de Cine de esa ciudad española, certamen realizado entre el 24 de octubre y el 1 de noviembre de 2008. Y aunque la película es española, cuenta con la actuación de la actriz chilena Blanca Lewin, quien protagoniza una de las historias que conforman el filme que ahora se presenta, como estreno exclusivo en Chile, en la competencia de largometrajes del Festival Internacional de Cine Digital que se realizará en Viña del Mar, a partir del 14 de enero.

Tres historias y media

A veces las parejas carecen de afinidad y nada parece unirlas. Así lo sugiere esta película que, en 90 minutos, presenta cuatro episodios que, lejos de arrancar suspiros románticos, muestran un lado más áspero y tal vez más ingrato en la relaciones de pareja. En la primera historia, Diego (Karra Elejalde) y su esposa Marian (Esther Nubiola), regresan a casa luego de haber participado de una cena en la que ella pasó todo el tiempo coqueteando con un guapo abogado. Razón de más para que Diego, siempre con un trago en la mano, y Marian se digan cosas de esas que luego no se pueden olvidar. En la segunda historia conocemos a Roberto (Coque Malla), un escritor de best seller atacado por una angustiosa sequía creativa. En estas circunstancias se encuentra con Clara (Blanca Lewin), su ex pareja, en un club de jazz. Por cierto, él diálogo que se inicia y que pasa por todos los tonos, deja en evidencia que entre ellos quedaron cosas pendientes. En el tercer episodio vemos otra vez a Diego, es esta ocasión enredado con Amanda (Lluvia Rojo), una niñera joven pero audaz a quien los hombres maduros resultan irresistibles. Y Diego lo es. Finalmente conoceremos un aspecto en la vida de Pablo (Pablo Rivero), quien, por esas cosas de la vida, debe pasar la noche en un motel de carretera, con María (Michelle Jenner), una muchacha desconocida.

“Íntimos y extraños es una película escrita y dirigida por Rubén Alonso quien además es responsable de la producción. Rubén Alonso es publicista y realizador y ha trabajado en numerosas e importantes campañas publicitarias españolas. Además es autor de la novela “Cuaderno para dos inviernos”. En el año 2001 funda su propia productora, con la que –hasta la fecha- ha producido 17 spots, tres cortometrajes y un largometraje, obteniendo 72 premios internacionales. Con “Íntimos y extraños”, su primer largometraje como productor y realizador, acaba de conseguir el Premio del Público en la Semana Internacional de Cine de Valladolid.

Blanca Lewin en España

Las películas “En la cama” y “Sábado”, ambas dirigidas por Matías Bize, fueron la razón por la que el director Rubén Alonso quiso contar con la participación de Blanca Lewin. La actriz chilena tuvo no sólo una destacada actuación en la primera película que él vio: “En la cama”, sino que obtuvo numerosos premios nacionales e internacionales por este trabajo. Por ello, se contactó con Adrián Solar, productor ejecutivo del filme, y a través de él llegó hasta Blanca. De su experiencia española, la actriz recuerda que su primera impresión fue la de: “un guión donde los personajes hablaban muchísimo y de una manera certera en extremo”. Hay que recordar que por esos días, Blanca grababa “Lola”, de manera que debía llegar a España con el guión memorizado pues sólo contaba con tres días de ensayo, por lo tanto, esta etapa la cumplió básicamente, durante el vuelo a Madrid.

“No conocía personalmente al director ni a Coque Malla”, cuenta y como para agregar dificultades, su personaje es lo que ella llama ‘imposible’: “Clara Rubio, una mujer en extremo compleja, histriónica, torcida al punto de esforzarse siempre en destruir aquello que ama, con sed de venganza, con una profunda pena, y a la vez encantadora y graciosa. Su manera de comportarse es como la de un pez fuera del agua, dando saltos y giros de un lado a otro o sobre sí misma: pasa de la comedia al drama en un tris”.

Recuerda que la experiencia fue vertiginosa: “Filmamos durante cinco días, con uno de descanso, entre medio. La historia está conformada por tres historias y un epílogo; todas se hicieron en dos semanas, contando ensayos y filmación. La nuestra ocurrió la segunda quincena de mayo, una locura, el director era prolijo en extremo y cada jornada de filmación se nos fue alargando, hasta que la última duró nada menos que... 20 horas! Sin embargo, yo lo pasé demasiado bien, fue un trabajo realmente entretenido. Recuerdo que esa noche, cuando ya llevábamos unas quince horas filmando, hubo un momento de crisis (cada uno tuvo la suya). A mi el cansancio me sirvió en un momento crucial para el personaje, porque finalmente, todas las energías que confluían, había que volcarlas en pro del trabajo y además, yo tenia que tomar un avión de regreso a Santiago y a “Lola”.

La actriz describe esta película como ‘bastante singular: “Son historias de parejas que no pueden, o no deben estar juntas; es como el camino inverso de las historia que buscan encontrar a dos personas. Tiene un tono de comedia que no me gusta llamar ‘negra’, pero algo retorcido hay en ella. A mí, por lo menos, me causa gracia. Es rara, es particular y eso la hace aún más interesante. Me alegra, por supuesto que le haya ido bien en Valladolid, que fue el Festival donde se estrenó, y donde casi no llegó terminada, pero creo que es un proyecto al que le queda larga vida aún girando por festivales y mostrándose a distintos públicos. Veremos cómo le va ahora con el chileno”.

Andrea A. Carvajal Sandoval
Agente de Prensa
Plaza Espectáculos